- Te miro encogido en tu dolor,
- pequeño cuerpo aterido,
- fulminado por el virus terrible,
- sangrando por tus ventanas,
- encharcado
- en medio de tus fluidos contaminados,
- mientras rezumas tristeza y miseria.
- Tus ojos de animalillo herido
- me miran llenos de dolor y recelo,
- miran a este que se acerca a ti
- envuelto en mil fronteras,
- encapuchado y protegido de ti mismo.
- Miedo contra miedo se miran.
- Tu indefenso y perdido,
- yo contradecido entre mi deseo de acogerte y abrazarte
- y el miedo al dragón en ti escondido.
- ¡Que fácil es recitar que yo soy tu y que tu cuerpo es mi cuerpo!
- ¡que difícil hacer de esto
- carne de mi carne y sangre de mi sangre!
- ¿Cómo sufrir tus heridas y tu porquería en mi cuerpo?,
- ¡Que difícil abrazarte en ese tu dolor,
- mientras tus ojos se cierran
- y tu boca se tuerce en un silencio de agonía
- que nada comprende !
- ¿Cómo sostendré mi oración en medio de esta miseria ,
- de esta contradicción de vida no comprendida?
- Contemplo tu cadáver pequeño y encogido,
- en esta tierra de dolor a la que vuelves
- en el cementerio ignorado,
- y tu espíritu atrapado me grita dentro,
- traza lagrimas de sangre en mi corazón.
- Me duele no haberte podido mostrar mi sonrisa,
- mi aliento,
- mi abrazo.
- Me duele no haber podido ser tu,
- perdido y huérfano,
- víctima mártir de este mundo contradecido,
- en el que los ricos presuntuosos
- presumen de salvar a los pobres,
- mientras tu pueblo en silencio mira y sonríe,
- una sonrisa triste
- que envuelve el polvo de los caminos
- de este tu campo, de esta tu tumba.
- ¡Enséñame lo que no pude aprender
- en este tu silencio,
- Ibrahim,
- hijo,
- amigo,
- hermano !
Ibrahim, el niño Ébola
Esta entrada fue publicada en Voces Intimas. Guarda el enlace permanente.
Gracias Pedro por compartir tu alma. Lo que has vivido te habrá enseñado tanto. Has tenido que vivir lo que predicas, la no-dualidad y nos dices que es muy difícil cuando hay tantas barreras infranqueables. Este pequeño sigue en tí profundamente y te habrá cambiado de alguna manera. Será esto la no-dualidad. Un abrazo.